Cada cuatro años se juega el mundial. Veintidós jugadores viajan en busca de la gloria y uno va a pasear. Desde el vamos se sabe que el tercer arquero no es otra cosa que un hincha con una butaca VIP, que viaja para vivir una experiencia distinta. Va a conocer ciudades, probar comidas raras, sacar fotos.

¡Basta! Hace 24 años que no ganamos nada. No podemos ocupar un lugar de la lista en alguien que va de paseo. Llevemos a alguien que sepa lo que es jugar un Mundial. Alguien que haya andado por el (resto del) mundo. Alguien que sepa lo que vale la camiseta de la Selección. Alguien a quien no le tiemblen las piernas a la hora de atajar a un penal.

Porque realmente puede hacer una diferencia, porque no hay otro que pueda hacer lo que él puede, decimos (para quien lo quiera escuchar): Goyco al Mundial!